Un primer tiempo con alto porcentaje de efectividad le permitió a Regatas Corrientes conseguir su segundo triunfo consecutivo como visitante, al vencer anoche a Quilmes 89 a 89. El encuentro, que se jugó en el Polideportivo Islas Malvinas correspondió a la segunda fase de la Liga Nacional de Basquetbol.
El Fantasma, que ganó cuatro de sus últimos cinco partidos disputados fuera de Corrientes, jugó en gran nivel durante el período inicial donde dominó a partir de su gran poder ofensivo con números destacados: 11 triples convertidos de 16 intentos y 18 asistencias, para llegar a tener una ventaja de 23 puntos.
En el complemento, Quilmes, con la explosión de Luca Vildoza achicó la distancia y al promediar el último cuarto quedó solamente 5 puntos abajo, pero Regatas siempre encontró respuestas con sus tiros externos para asegurar la victoria.
En el inicio del cotejo, el equipo correntino mostró un buen juego colectivo para atacar. Paolo Quinteros era doblado en la marca, sin embargo, el goleador tuvo generosidad, pasó el balón y siempre aparecía algún compañero libre para realizar un lanzamiento cómodo.
Durante los 10 minutos iniciales, la visita anotó 7 de 9 triples y allí estuvo el principal argumento para ganar el parcial 33 a 21.
La regularidad en el ataque le permitió a Regatas aumentar el dominio en el encuentro porque además se hizo fuerte en defensa (controló la lucha por los rebotes), entonces no extrañó que se distancie por 23 puntos.
La esperada reacción de Quilmes tardó en llegar porque en el tercer segmento intentó cambiar punto por punto, situación de juego donde Regatas se siente muy cómodo. Con la aparición de Vildoza, y el elevado número de balones perdidos por Regatas, el conjunto marplatense se puso en juego.
A cinco minutos del final, la diferencia quedó reducida a 5 puntos, pero Regatas volvió a lastimar con los tiros de tres puntos para asegurar el triunfo, el segundo de la presente gira dado que ya había ganado en Bahía Blanca. Mañana, Regatas se volverá a presentar en Mar del Plata para enfrentar en esta oportunidad a Peñarol.

Fuente: El Litoral

DESDE BUENOS AIRES

Ruben Poletti  (Enviado Especial)

Boca Unidos volvió a perder, esta vez por 2 a 1 ante Ferro Carril Oeste en Caballito, y extendió a cuatro la racha de partidos sin sumar puntos. El partido, por la vigésima quinta fecha del torneo de la Primera B Nacional tuvo alternativas cambiantes de dominio, y también en cuanto a la relación de jugadores en cancha, con un arbitraje al menos polémico de Mario Ejarque.
En la primera acción de ataque del partido, Ferro se puso en ventaja. Boca Unidos volvió a sufrir en carne propia la pelota parada. De un tiro de esquina desde la derecha del ataque local que pasó frente a toda el área chica, Canto logró impactar a la pelota de manera poco ortodoxa, para dejar sin chance a Henricot. La acción se originó en un remate de Fornari desde afuera del área que se desvió en un defensor y que luego la tocó volando hacia su izquierda del arquero correntino.
Nervioso e impreciso, la visita no tuvo claridad para reaccionar de forma inmediata, y su adelantamiento desordenado abría la puerta para el contraataque del local, donde Salmerón encendía las alarmas cada vez que tomaba contacto con la pelota.
Al fin, pasado el primer cuarto de hora, el Aurirrojo llegó con una pelota que Valsangiácomo bajó en el área para Miño, que tuvo que acomodarse recostado por izquierda para su perfil diestro, y su remate se fue ancho, pasando frente a Núñez, que no quiso intervenir por considerar que estaba adelantado.
Oeste contestó con una buena jugada individual de Fornari por izquierda, que se sacó de encima a dos hombres y sacó el derechazo que Henricot echó al córner.
Sin mejorar en el juego, el partido se tornó de repente emotivo, por las acciones de riesgo que comenzaron a sucederse. A instancia del asistente, Matías Bianchi, el árbitro Mario Ejarque le anuló un gol a Núñez, quien cabeceó bajo “de palomita”, contra el vertical izquierdo de Bailo, que no llegó, luego de un tiro libre del “Malevo” Ferreyra.
La más clara de Boca Unidos llegó tras un rechazo corto de Bay. Miño metió el centro buscando en el segundo palo a Núñez, y el rechazo defectuoso de Izco le quedó ingresando sólo por derecha a Valsangiácomo, cuyo derechazo fue devuelto por la base del palo izquierdo del equipo local.
Con más empuje que buen fútbol, Boca Unidos comenzaba a hacer los méritos para llegar a la igualdad. Sin embargo, el que casi aumenta es Ferro, luego de un remate esquinado de Luján que Henricot, a contrapierna, volvió tras sus pasos, para meter el manotazo abajo y sacar providencialmente la pelota al córner.
Luego de esa acción, Boca Unidos, que comenzó a mejorar el traslado de la pelota, tuvo dos chances para anotar. Primero, Núñez -comenzó a gravitar mucho cada vez que entró en el circuito ofensivo- le ganó la posición con el cuerpo a Canto para ensayar un “puntazo” que controló abajo Bailo. Enseguida, y luego de una jugada por izquierda entre Miño y Villoldo, el mercedeño metió el centro para Núñez, quien le bajó de pecho a Valsangiácomo, y el zurdazo de este se desvió en un defensor para perderse por sobre el travesaño.
El premio para Boca Unidos llegó tras un penal que Ferreyra transformó en gol. La jugada, que llegó luego de una sucesión de toques con buen control de pelota en el ataque, fue un pase profundo de Ríos para Miño, que cuando encaraba hacia el arco fue derribado por Barsottini, quien fue inmediatamente expulsado por doble amonestación, dejando a su equipo en inferioridad numérica.
Antes de que termine la primera mitad, y con el envión que le dio el empate, el Aurirrojo estuvo cerca de ponerse al frente del marcador. Miño dejó a Izco en el camino y penetró en el área, pero su envío buscando el ingreso de Valsangiácomo, no fue tan preciso, atrapando Bailo la pelota en el primer palo.
Al comienzo del complemento, un error de Henricot por poco le cuesta caro a su equipo. El arquero se demoró en rechazar una pelota jugada hacia atrás, rebotando en Salmerón, enmendando el de Zárate, ganándole en el piso a Luján que entraba para empujar el balón a la red.
A pesar de que lo más lógico era que Boca Unidos salga a buscar ponerse al frente aprovechando el hombre de más, fue el local que empujó contra su área a la visita. Ferro, a pesar de tener un mediocampista menos (ingresó Amarilla, un defensor en lugar de Ojeda, para armar la línea de cuatro), mostró mayor actitud en el inicio del segundo tiempo.
En dos minutos, lo que era una ventaja numérica para el equipo de la ribera se transformó en una desventaja. En dos acciones muy discutibles, Ejarque le sacó la segunda tarjeta amarilla, primero a Ortíz y luego a Sánchez Paredes, quedando la visita con nueve.
La reacción de Domínguez fue volver a armar la línea de cuatro, haciendo ingresar a Morales por Valsangiácomo, y luego intentar reconstruir la mitad de la cancha con Ataliva Schweizer por Miño. En tanto que Broggi colocó a un delantero, Castillejos, por un defensor, Izco.
A fuerza de centro tratando de ubicar, principalmente a Salmerón y Castillejos, Ferro buscó el desequilibrio ante un equipo que se recostó muy atrás, dando la impresión de que se quedó sin resto.
La tuvo Castillejos, pero la pelota le quedó un poco atrás y cabeceó desviado. En la siguiente no falló, pero estaba adelantado, y su gol fue anulado. Sin embargo, enseguida tuvo su revancha; ya en tiempo adicionado, Vernetti fue a buscar una pelota, Morales lo cruzó en el límite del área, y el árbitro cobró penal, que el goleador transformó en gol y triunfo para los de Caballito.
Boca Unidos volvió a perder, lleva cinco partidos sin ganar, y la racha de malos resultados no se detiene.
Fuente: El Litoral

LOS DEMÁS
Por el torneo de la B Nacional ayer Brown de Adrogué y Flandria igualaron 1 a 1, mientras que terminaron en tablas All Boys e Independiente Rivadavia (2 a 2). Villa Dálmine se impuso 2 a 0 sobre Los Andes y Douglas Haig 1 a 0 ante Gimnasia de Jujuy. En  San Luis, Estudiantes y Nueva Chicago terminaron 1 a 1.
Hoy a las 16, el puntero Brown de Madryn recibirá a Santamarina de Tandil y a las 17 San Martín en Tucumán enfrentará a Instituto de Córdoba.

El partido se disputó en el Agustín Faraldo de Paso de los Libres, con arbitraje de una terna de Bella Vista y contó con un buen marco de público.
Madariaga, dirigido por Fabián Ponce, fue superior al representativo casereño y a los 25 minutos del primer tiempo se adelantó en el marcador gracias al gol convertido por Federico Ovando. Sobre el cierre de esta etapa, apareció el artillero Carlos Leiva para aumentar la cuenta a los 43 minutos y, dos más tarde, Cristián Encina puso el 3 a 0 para ir al descanso.
Ya en el complemento, se mantuvo la superioridad de Madariaga y así, a los 20 minutos, otra vez Carlos Leiva anotó para los locales que estiraron el marcador 4 a 0. 
Finalmente dos minutos después, mediante Nelson Cáceres, Florida descontó y selló el marcador final 4 a 1 para Madariaga.
Pese al buen juego y rendimiento demostrado por el equipo libreño, Florida fue un digno rival, y consiguió marcar un gol de visitante, que para los antecedentes de esta cuarta edición de la Supercopa no es un dato menor teniendo en cuenta que la revancha aún debe disputarse, y en Monte Caseros.

En la continuidad de la quinta fecha del Campeonato Argentino de Clubes de Básquetbol, Hércules de Corrientes perdió en su presentación en Sáenz Peña frente a Acción 73 a 68.
El encuentro que se disputó el viernes por la noche en la ciudad del interior chaqueño tuvo como goleador en el conjunto local a Germán Rearte con 17 puntos.
Los primeros diez minutos favorecieron a Hércules 25 a 19, pero después el local reaccionó y se quedó con los otros dos parciales: 38 - 34 y 60 - 51.

Para el Rojinegro, que sigue como único líder en la Conferencia Norte (31 triunfos y 11 derrotas), fue una noche con irregularidades que le impidieron encausar el cotejo a su favor.
En el primer tiempo fue todo muy parejo. Los dos equipos mostraron virtudes y defectos para mantener el marcador con poca diferencia a favor de uno y otro equipo.
La pequeña ventaja de Peñarol en los primeros 20 minutos se dio por la supremacía en el juego interior (20 puntos y 21 rebotes, contra 14 y 17, respectivamente).
En el tercer parcial, se vio lo mejor del conjunto marplatense que se hizo fuerte en defensa (permitió solamente 12 puntos del rival) y encontró algunas variantes para llegar al gol.
La máxima diferencia a favor del local, llegó en el amanecer del último cuarto cuando sacó 16 tantos.
Lentamente comenzó a crecer la figura goleadora de Reynaldo García Zamora y San Martín salió a presionar bien arriba en el rectángulo de juego. Con la salida por cinco faltas del base Juan Pablo Figueroa, Peñarol tuvo problemas en el traslado del balón y el equipo correntino lo aprovechó. Cuando quedaban menos de dos minutos, la brecha se achicó a 5 (75-70) pero el local lo definió con dos libres Louis Dabney y un triple, el único de la noche, de Leonardo Gutiérrez.
Mañana, San Martín visitará a Boca en la Bombonerita.

Fuente: El Litoral